Si con la voz abierta
en la luz que descubre los espejos del mundo,
esparcimos miradas
y hasta besos y abrazos.
Si con la piel tendida
en la mueca callada del mendigo,
abrazamos esquinas, caminos y pobrezas.
Si encontramos el cauce de la sombra
en este atardecer
donde afloran la sed y los deseos.
Si fuéramos un tacto, solo un tacto,
un tacto universal,
donde cantaran fuentes de paz y de esperanza
brotaría, como un cauce alado,
el nuevo amanecer
el abrazo total donde sentir que somos
un paisaje de amor eternamente.
en la luz que descubre los espejos del mundo,
esparcimos miradas
y hasta besos y abrazos.
Si con la piel tendida
en la mueca callada del mendigo,
abrazamos esquinas, caminos y pobrezas.
Si encontramos el cauce de la sombra
en este atardecer
donde afloran la sed y los deseos.
Si fuéramos un tacto, solo un tacto,
un tacto universal,
donde cantaran fuentes de paz y de esperanza
brotaría, como un cauce alado,
el nuevo amanecer
el abrazo total donde sentir que somos
un paisaje de amor eternamente.
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